En esta ocasión, tuvimos una sesión de fotos post-comunión en una finca fuera de Madrid, donde pudimos disfrutar de una divertida tarde en un entorno natural.
Compartimos la emoción de verles montar a caballo, de jugar con los animales y disfrutar del ambiente con sus familiares. A pesar de los nervios, fueron muy valientes posando mientras daban un paseo a caballo. Nuestros protagonistas además de ser primos, son amigos y parte de nuestra misión es reflejar en las fotografías todo el cariño que se tienen.